Etiquetas

domingo, 17 de abril de 2011

Ni padres ni hijos: hermanos.

QQTUCHA LOGRÓ REVERTIR UNA RACHA ADVERSA CONTRA LURO CON UN EMPATE EN CERO QUE NO LE SIRVIÓ A NINGUNO, SALVO A LOS HERMANOS ZAMOLO QUE NO PODRÁN BARDEARSE.

Fue un partido emocionante por lo que representaba (ambos equipos se conocen desde antes de la Copa Episco y, como la Acadé y el Rojo de los Milito, cada uno cuenta entre sus filas a uno de los hermanos Zamolo). También fue emocionante por lo que pasó. De las dieciseis jugadas de gol del partido, no convirtieron ninguna. Hasta un penal fue malogrado. Luro y QQtucha fueron una máquina de generar situaciones de gol. También una máquina de errarlos. De todos modos nadie se aburrió: ni los jugadores, ni el público. Fue uno de esos empates que si alguno se llevaba los puntos con un gol pavote, se perdía la energía que quedó contenida. Los palos y el travesaño fueron cómplices insospechados: fueron besados en tres oportunidades y los arqueros hicieron lo suyo, en especial el rojoamarillo que bloquea muy bien, con su típico buzo verde, los intentos contrarios. Las más claras: el penal que se comió el hábil qqtuchense Guinea y mandó a la parrilla y la salvada con el pecho de Eugenio Savage cuando la pelota se disponía a cruzar la línea de gol y poner a Luro arriba en el marcador. Luro, al menos por ahora, perdió la punta, la racha ganadora, su paso arrollador de campeón y la capacidad de convertir siempre. QQtucha sólo suma su primer punto en lo que va del torneo y ve alejarse a la vanguardia. Por lo tanto no hay otra: por lo menos una Pascua tranqui en la Zamolo´s house.

No hay comentarios:

Publicar un comentario