Dicen que la felicidad es un estado del Ser que se construye. Luro viene construyendo su felicidad con gran soltura desde que comenzó la edición 2012 de la Copa Episco. Más relajados y con la fortuna que sale todo lo que el año pasado no salía, los azules además van fortaleciéndose como equipo. No sólo gana, sino también golea y gusta. Esta vez, le tocó a Big Boy que sigue carreteando en la incertidumbre. A los 5 minutos, Ariel Aranda cabeceó como corresponde un centro del corner y puso a su equipo arriba en el marcador. A los 10, otra vez el Arandamóvil guapeó dos veces la propiedad del balón y, adentro del área, mandó un bombazo que el arquero se tuvo que esforzar por sacar al corner. En Big Boy Ergo, muy atrás, se multiplicaba en la recuperación de la pelota y en la generación de juego, dando grandes ventajas por estar tan lejos del arco rival. Los ráfagas de habilidad de Buero y Piteo no alcanzaban para crear peligro y Gustavo Villar peleaba muy solo arriba. A los 24, un penal cobrado que convirtió Ariel Aranda, puso muy nerviosos a varios bigboys y les complicó aún más las cosas la expulsión y reacción fuera de lugar del arquero Rodríguez. Dos a cero y con un jugador menos. Hay que reconocer la dignidad de los violáceos al tratar de mantener la calma y seguir haciendo fútbol, inclusive a los 10 del segundo tiempo después de que Ariel Aranda probara con un pelotazo desde tres cuartos de cancha que desvió el improvisado arquero pero le quedó justa al "Colo" Vigano para empujar a la red y poner el 3 a 0. Lejos de entrar en un estado depresivo colectivo, Juega Sicardi, se puso la lanza, se le fue a la marca por izquierda, mandó un centro que Mario Dini, con calidad, tocó por arriba del arquero y mandó la pelota a la red. Luro se plantó y manejó con criterio el desarrollo del juego ante un Big Boy que se fue con todo arriba. Toque y toque para relajar las cosas, llevó a Luro a estar bien seguro y crear situaciones para aumentar la diferencia. A los 20, Pablo Zamolo mandó un zurdazo que se fue apenas afuera. A los 25, otra vez Pablo Zamolo envió un centro que el "Pelado" Vigano conectó adentro del arco con un cabezazo que consolidó la goleada. Con puntaje ideal, el equipo azul hasta ahora hizo lo que tenía que hacer y las cosas salieron según lo planeado. Y la felicidad se nota.
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Muchachos de Big Boy, cuando comenten no olviden identificarse, porque alguno escribió un mensaje poniendo en duda a la organización del Torneo y al árbitro y no queda claro a quién contestarle.
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