Defensores de la Quilmes y Los Tanos jugaron uno de los mejores partidos de la Copa Episco, lleno de fútbol, potencia, inteligencia, suspenso y sorpresa, pero también con marcas al límite que sacaron algunas chispas. El puntero encontró una eficiente resistencia en la marca y el juego tano que no podía descifrar. De hecho sólo podía desequilibrar con la subida de Eduardo Arnay hasta tres cuartos. A los 4 el travesaño salvó a los cerveceros de la primera caída cuando Diego Peña puso el pie y desvió hacia el arco un tiro libre rasante. A los 6, otra vez Peña tuvo la apertura del marcador en sus pies, pero el remate cruzado se fue lejos del palo izquierdo. Recién a los 12, Fabricio Lunetta pudo aprovechar una oportunidad desde afuera del área que se fue cerca. Pero a los 16 una jugada con el sello de los quilmes puso el 1 a 0. Fabricio Lunetta se llevó la pelota en tres cuartos, abrió para Joaquín Velo por derecha y en cuestión de unos toques éste habilitó nuevamente al pelado que entraba al área y pateó al gol a la carrera. Cuando va arriba en el marcador el equipo blanco impone su ritmo y resulta letal. A los 20 se perdió el empate Jonatan Vargas, pero en dos minutos casi el partido se pone tres a cero. Primero con una apilada de Lunetta hasta la línea de fondo con remate tapado por el arquero tano al corner. Después con un excelente zurdazo cruzado de Pablo Pierotti que se fue muy cerca. El comienzo del segundo tiempo fue inesperado. Los Tanos se fueron con todo y al minuto nomás pusieron el empate y aumentaron las esperanzas de sacarle aunque sea unos puntos al equipo con puntaje ideal. Corría un minuto cuando unas imprecisiones en el fondo cervecero resultaron fatales. Robó la pelota Martín Cervirizzo y pateó desde tres cuartos a la red encontrando al arquero a contrapié. El empate le sentaba bien al partido por lo hecho por ambos equipos. En esta adversidad, Pablo Pierotti puso la todoterreno y empezó, con empuje, a llevar a su equipo hacia adelante. A los 9 un pelotazo de Alejandro López dio en la defensa y se fue al córner cuando tenía destino de gol, a los 23 su pelotazo dio en el travesaño y a los 25, tras un buen amague, la pelota dio en el arquero y se fue al córner. A cuatro del final, un cabezazo de Ortiz que entraba, fue despejado en la línea. La cosa parecía que terminaba en empate. Pero al minuto de terrminar, Pierotti cedió la pelota para Lunetta. Éste recibió en el área, eludió su marca primero y al arquero después, enganchó para adentro de frente al arco y pasó la pelota entre las piernas de tres defensores convirtiendo el gol del triunfo, que fue gritado como nunca, como una clara muestra de lo que costó. Trece partidos jugados, trece ganados, Defensores de la Quilmes se posiciona como un firme candidato a quedarse con las rondas de clasificación y con la Copa Episco.
PERRITO: FELICITACIONES, LA VERDAD ME SACO EL SOMBRERO PORQUE ES INCREIBLE LO QUE HACES CON LAS FOTOS..TENES REGISTRADO EL ÚLTIMO GOL DEL PARTIDO COMO SI FUERAS DEL GRÁFICO! ABRAZO Y GRACIAS POR TANTA MAGIA.
ResponderEliminarEDUARDO
La verdad a veces me sorprende a mí mismo. Las fotos están bárbaras, pero el golaaaa, genial. Como diría Borges "Acaso eso es la poesía"
ResponderEliminarestuve viendo que hasta una grua ya alquilas para las fotos ya esto es un lujo perro ...
ResponderEliminarCrosty